viernes, 30 de diciembre de 2011

La muerte del chaneque




Gente del campo y la ciudad. Abogados y campesinos. Indígenas nahuas y mestizos universitarios. Todos tienen algo qué decir de los chaneques y los aluxes. Unos creen declaradamente; otros más creen... pero nomás poquito. Los más dirán que no creen, pero relatarán, con voz emocionada, alguna historia de primera, segunda o tercera mano, que “les consta” y no pueden explicar... Y, con amargura en la voz, acusan los viejos: los niños de hoy ya no creen en chaneques.

Sierra Negra de Puebla. Un universitario mira las cimas de los cerros elevarse triunfantes sobre la niebla. Se siente “como en la isla de King Kong”, dice. No es un lugar para científicos rabiosos. La montaña es cerrada, húmeda y fría. Exacerba los sentidos. Un grupo de espeleólogos lleva varios años explorando las cavernas de la zona: Los Chaneques, La Casa de Niebla, La Casa de Cristal, La Cueva de Agua y El Encanto. Geólogos, universitarios y espeleólogos despliegan el rigor técnico de sus mapas topográficos y mediciones del subsuelo. Pero el manto citadino no los protege del mito de los chaneques o “los innombrables”, como les dicen en Iztaxochitla.

En ocasiones —relatan uno, dos, tres universitarios— se han perdido a tres pasos de la vereda. Algunos dirán que son las condiciones climatológicas: con lluvia o neblina el paisaje se vuelve extraño. A veces no se alcanza a ver más de medio metro enfrente de uno. Pero la mayoría coincide: no sólo es eso. Porque, después de verse perdido por horas, alguno realizará el ritual que les mostró Juanita, una señora del lugar, para cuando hayan entrado a la dimensión de los chaneques y no puedan salir: una oración en nahua a “los innombrables”, y luego partir una hoja con un machete o navaja... el camino, dicen, se muestra de inmediato.

Arturo, un biólogo de 37 años, cuenta una historia más. No fue el protagonista, sino, asegura, testigo directo. Hace unos seis años, el 23 de diciembre, dos espeleólogos, Lorenzo y Gabriela, caminaban por la sierra. Iban a alcanzar a sus compañeros, que acampaban en el paraje El Chantoro, pero se proponían antes explorar una cueva llamada El Encanto. Antes de llegar a la comunidad más cercana, Iztaxochitla, se encontraron con unas señoras vestidas “de manera peculiar” —como citadinas, pues. Una de ellas le dijo a Lencho: “Yo a ti te conozco: te gusta visitar cuevas, pero en esta ocasión no vas a entrar. Ni te lo imagines que vas a entrar”. Lo mismo le dijeron a Gabriela.

Cuando llegaron a Iztaxochitla le contaron lo sucedido a Juanita. Ésta les dijo: “Yo que ustedes les hacía caso, porque esas mujeres son los enviados de ‘los innombrables’”. Gabriela y Lencho prosiguieron su camino. Llegaron al campamento al anochecer. Al día siguiente Gaby amaneció muy enferma; tanto, que no pudo ni salir de su tienda. Los demás comenzaron a prepararse para ingresar a El Encanto: casco, arnés, cabos de seguridad. Debajo del overol llevaban un traje de neopreno, ya que la cueva lleva mucha agua, y muy fría. Cuando comenzaron a descender, Lencho sintió un terrible dolor en el vientre. Como de apendicitis, pensó, consternado. Salió de inmediato. En cuanto se quitó el neopreno se dio cuenta de que una piedrita de carburo (el combustible que antes se utilizaba en las lámparas para cuevas) había caído entre el neopreno y su piel; con el sudor, el carburo hizo reacción y le quemó el vientre y parte del pecho.

Ni Gaby ni Lorenzo bajaron ese día a las cuevas. Entre los compañeros se cuestionaban, entre broma y no broma: ¿fue coincidencia o fueron los chaneques?

EL GRAN CHANEQUE
En 1897, el topógrafo Ismael Loya descubrió una gran estatua en la cima del volcán San Martín Pajapan, del sistema montañoso de los Tuxtlas, Veracruz; sobre ella, en 1968 el arqueólogo veracruzano Alfonso Medellín escribió que los indígenas popolucas y nahuas siempre supieron de su existencia, y que la “nombraban Chane, ‘el chaneque’ o nuestro ‘padre San Martín’ (...) algo que se respeta, se teme, se propicia y se venera”.

En los Tuxtlas la gente del campo relata cómo en los caminos solitarios, cerca de la laguna Encantada de la Cueva del Diablo, todavía se siguen escuchando las voces de niños pequeños. Pero no hay nadie. Son los chaneques, dicen. Elsa, instructora de yoga de 58 años, vive en Cancún, Quintana Roo, pero creció en Veracruz: Xalapa, Santiago y San Andrés Tuxtla. En su primera infancia vivió en el rancho Perseverancia, Loma Bonita (colindando con Oaxaca). Ahí, asegura, conoció un chaneque. Tendría unos cuatro años cuando, cuenta, hizo un amiguito. Era un hombrecito negro, del tamaño de ella misma, sin camisa y con pantalón azul. “Me platicaba que había personas que vivían debajo del agua”. Cuancuanco era su nombre.

Un día la mamá de Elsa se dio cuenta de esto y se lo platicó a su compadre, un señor de apellido Navarrete. “Esto es muy peligroso”, le dijo el señor, “porque los chaneques pierden a los niños”. La familia mandó traer un cura y fueron exorcizados el rancho, la casa señorial y los alrededores. Desde entonces, cuenta Elsa, no volvió a ver a Cuancuanco.

—¿Y los aluxes?

—Son iguales que los chaneques. Cuidan la milpa, pero también debes pedirles permiso para entrar al monte. Cuando acá (en la Península) se pierde una persona en el campo, antes de llamar a Protección Civil, la mayoría llama a un curandero para pedirle permiso a los aluxes de pasar a buscar. De otra forma, aunque esa persona esté enfrente de ti, no la podrás ver.

UNA TACITA DE CAFÉ
La señora Teresa es una abogada originaria del Distrito Federal (DF) que vivió varios años en Mérida. “En la zona maya, nadie duda de la existencia de los aluxes”, sentencia. “No importa la clase social a la que pertenezca la gente”. Del DF se llevó, entre otras cosas, un horno de microondas que “no funcionó cuando llegué a Mérida. Originalmente pensé que se había estropeado con el viaje. Así que lo regalé. Y un día, en un Carrefour, ofrecían unos hornitos de microondas y me compré uno. Llegué con mi nuera a la casa. Pusimos dos tazas de agua para hacernos un té y funcionó. Pero a la mañana siguiente ya no encendió. Lo regresamos a la tienda, pero ahí funcionaba perfectamente”.

Llamaron a un electricista. La instalación eléctrica de la casa estaba bien; el horno estaba bien. El electricista concluyó: son los aluxes. Recomendó a Teresa que se deshiciera del horno. Si los aluxes no quieren horno, mejor no tenerlo. Llamaron a un segundo electricista. Recomendó lo mismo. Teresa se deshizo del horno y no volvió a tener problemas. Fue muy feliz durante su estancia en Mérida, y su jardín siempre estuvo esplendoroso. Ya de regreso en el DF una vez compró una figurita de un aluxe en una feria: “Todos los días le sirvo una tacita de café. Y todos los días se evapora”.

BOSQUE AGONIZANTE
El historiador rumano Mircea Eliade escribió en El mito del eterno retorno (1951) que los mitos siguen vigentes porque en ellos el hombre repite el acto de fundación, elevándolo a acto cosmogónico mediante los ritos de los objetos venerados. Así, los mitos y leyendas populares —en este caso prehispánicas— no son sólo historias, sino que forman parte del cemento que cohesiona un pacto social y un elemento que lo renueva. La antropóloga Luisa Paré Ouellet y la bióloga Elena Lazos escribieron en el año 2000 el estudio Miradas indígenas sobre una naturaleza entristecida. Percepciones del deterioro ambiental entre nahuas del sur de Veracruz, donde concluyen que el mito de los chaneques controlaba socialmente el cuidado de los recursos naturales, los bosques y selvas, e imponía normas de sustentabilidad para los pobladores. “Estos duendes no sólo existen en los Tuxtlas, zona famosa por sus brujos y chaneques; son comunes a prácticamente todas las regiones boscosas de América Latina e incluso del mundo. Aparecen en muchas culturas bajo distintos nombres, con una heterogeneidad de formas y actitudes, pero todas sus expresiones nos reflejan parte del espíritu humano”. Pero “Ora ya nadie cree”, relata el testimonio de don Hilario, recopilado por las investigadoras. “Antes para agarrar agua había que pedir permiso. Sus dueños (en alusión a los chaneques) ya no quieren que mates animales. No puedes matar hembras, ni pequeñitos. Pobres venados, cómo se han acabado”.

Si bien los chaneques y los aluxes permanecen, algo se trastoca al desvanecerse las selvas y bosques que una vez protegieron: la Sierra Negra sufre un deterioro irreversible, y los ediles de la región han identificado como delitos más frecuentes el robo de vehículos y la tala clandestina. Los espeleólogos advierten de la tala sistemática de la sierra para la siembra de maíz, cultivo que deja yerma la tierra en una o dos temporadas.

En Los Tuxtlas está la selva húmeda localizada más al norte del continente americano. Desde 1980 la sierra de Santa Marta o de Soteapan —ahí donde reinaba en la cima del volcán el Gran Chaneque— fue declarada Zona de Protección Ambiental, y en 1998 fue reclasificada como reserva de la biósfera; sin embargo, la deforestación, debida sobre todo a actividades de ganadería, nunca se detuvo. Estudios de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) consideran que se ha perdido el 90 por ciento de las selvas y bosques de niebla de Los Tuxtlas. Y los núcleos de bosque que quedan se encuentran fragmentados: porciones de bosque aquí y allá divididas por pastizales. Esta fragmentación ha provocado la desaparición de unas 10 especies de anfibios y reptiles en los últimos 10 años, como lo anunció en abril pasado un comunicado de la UNAM. También ha desaparecido el jaguar, que no cuenta con el espacio necesario para sobrevivir: el Gran Chaneque que dejó de caminar su sierra.

CREENCIA QUE SE RECICLA
El antropólogo Elio Masferrer Kan es quizá uno de los más reconocidos expertos sobre antropología de las religiones. Es Presidente de la Asociación Latinoamericana para el Estudio de las Religiones, y de 1979 a 1984 ocupó el cargo de Investigador Asociado del Instituto Indigenista Interamericano, organismo especializado de la Organización de los Estados Americanos. Masferrer Kan relata que los chaneques tenían la función de cuidar el bosque, pero que ya no hay bosque, y entonces han pasado de ser protectores a ser figuras amenazantes. Lo mismo ha ocurrido con otro personaje de la sierra norte de Puebla: Juan del Bosque.

—¿Qué tipo de problemas conlleva esto?

—De tipo sociológico. Un personaje que antes se veía protector ahora es amenazante. Está molesto porque destruyeron el ecosistema que tenía que proteger. Lo mismo pasa con los nahuales. Hay algunos antropólogos que investigaron a los nahuales en la ciudad, donde también pasaron de ser figuras muy poderosas a ser muy amenazantes. Se encontraron relatos en las colonias populares que atribuían a los nahuales el robo de tubería, por ejemplo. Todo esto forma parte del proceso de reciclaje de los personajes.

—¿Por qué personas de la ciudad también relatan historias de chaneques?

—Lo que pasa es que muchas veces la gente puede tener determinadas creencias, pero no las quiere hacer explícitas. A un científico le dará pena creer en esas cosas, por lo que tendrá un comportamiento totalmente ambiguo. Pero son un conjunto de creencias compartidas por todos los mexicanos.

—Entonces ¿está vigente el mito del chaneque?

—Sí. Por supuesto. Y hay otros: los que se van de rodillas, pidiendo a la Virgen, o los que creen en San Judas Tadeo. La gente cree, y esto sigue regulando los comportamientos en el país. Hay un dicho popular que dice: “Las brujas no existen; pero de que las hay, las hay”.

LA CASA DE NIEBLA
Iztaxochitla, Sierra Negra de Puebla, abril de 2011. Édgar, Omar y Ulises, jóvenes universitarios, quieren explorar una cueva. La entrada (un hoyo que desemboca a lo desconocido) se encuentra junto a un cerro. Deben descender una suerte de rampa natural para acercarse a la entrada. La estrategia: colocar una cuerda para recorrer con seguridad la rampa y colocar una segunda cuerda para el tiro de la entrada. Mientras están colocando la cuerda de la rampa el cielo se nubla por completo y empieza a llover. Unos minutos después, a unos 30 metros de distancia, cae un árbol. El ruido los asusta. La lluvia los cala, la niebla desciende, todo el ambiente se enrarece, pero siguen trabajando. Omar conecta su descensor (comúnmente llamado “marimba”) a la cuerda y comienza a bajar por la rampa. Se está acercando al tiro de entrada cuando, a unos cuantos metros de él, se desgaja un pedazo del cerro y cae en la cueva. El ruido es ensordecedor. Omar relata: “Termina el bullicio, ¿sigo aquí? La conciencia vuelve, pero se va y da paso al pánico (...) Salgo como puedo, con lo que puedo...”.

Abandonaron la exploración. Conforme se fueron alejando del lugar, dicen, la lluvia cesó, salió el sol y vieron un arcoiris. Al día siguiente regresaron. Pudieron entrar. Nombraron al sitio “La Casa de Niebla”, porque la neblina desciende y parece ser tragada por la cueva. Cuando regresaron a Iztaxochitla, Juanita les dijo que lo que pasó fue que en las cuevas donde hay neblina viven “los innombrables”: los chaneques.

Lydiette Carrión

*Publicado en Milenio Semanal

jueves, 22 de diciembre de 2011

Luto y tortura. Las dos caras del 2 de octubre

Lydiette Carrión


A partir de ahora es oficial: la bandera mexicana deberá izarse a media asta cada 2 de octubre, en señal de luto por los estudiantes asesinados en la plaza de las Tres Culturas en 1968. Pero el tema de los estudiantes y la represión no termina.

Este martes, el mismo día en que se publicó el decreto del 2 de octubre en Diario Oficial de la Federación, la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF) emitió la recomendación 10/2011, en el que documenta los casos de cinco personas que sufrieron tortura en manos de la policía capitalina. Uno de ellos es Víctor Herrera Govea, golpeado primero por granaderos y después por policías judiciales durante la marcha del 2 de octubre de 2009.

Víctor es un chavo de ideas anarquistas, que ese año (2009) fue a la marcha de los estudiantes. A la altura de Bellas Artes, varios manifestantes comenzaron a apedrear las vitrinas de un Oxxo y se enfrentaron con granaderos. Hay videos de los hechos, y en ellos nunca aparece Víctor. En cambio sí se aprecia a otro joven vestido de amarillo, quien fue detenido por policías y casi inmediatamente soltado.

Si bien no se comprobó la participación de Víctor, los granaderos lo detuvieron y lo golpearon. Los hechos fueron grabados por estudiantes. El video fue subido a Youtube. Ahí se aprecia a Víctor con el rostro, la playera y el pelo llenos de sangre, agarrado del cinturón por un policía; de frente a las cámaras lo deja ir.

Sin embargo, después de la marcha, judiciales vestidos de civil lo arrestaron. Éstos declararon que lo habían detenido infraganti robando el Oxxo. Lo volvieron a golpear. Según la recomendación de la CDHDF, uno de ellos le golpeó la cabeza en una jardinera, cuando ya estaba detenido.

A pesar de que Víctor no aparece en ninguno de los videos del saqueo al Oxxo, en 2010 una juez determinó que Víctor era culpable. Lo condenó a dos años 9 meses de cárcel y 90 días de multa (4 mil 932 pesos), además de 6 mil 500 por los daños a la tienda Oxxo y 2 mil 2 pesos por el valor de los objetos “robados”.

La familia de Víctor decidió no impugnar la sentencia para sacar a su hijo de la cárcel. Llevaba ya un año preso en el Reclusorio Norte. La recomendación de la CDHDF es un poco de justicia frente al abuso que jueces y policías cometieron contra Víctor.

Columna "rendija" publicada en El Universal Gráfico el 22 de diciembre de 2011

También:

Víctor Herrera y Emmanuel: breve historia de terror sobre los penales del Distrito Federal
Víctor Herrera Govea: sentencia condenatoria
Víctor y la acción directa

martes, 20 de diciembre de 2011

Claroscuros del caso Marichal


*Imagen tomada de Facebook. Perfil "Palo de Ron".


Torcer un poquito las palabras ayuda a generar “presuntos culpables”.

Con el nuevo tipo penal que sanciona el delito de feminicidio en el Distrito Federal, las autoridades han buscado ser eficientes. No cabe duda, por ejemplo, que hicieron un buen trabajo en el caso de las periodistas Marcela Yarce y Rocío González, quienes el pasado 31 de agosto fueron asesinadas.

Pero ese éxito puede impulsar a las autoridades a violar los procedimientos penales y los derechos de los implicados, en aras de seguir presentando ante la prensa un récord de “eficiencia”.

El caso del feminicidio de Julia Marichal, actriz destacada en el ámbito artístico e intelectual de nuestro país, parece ser campo fértil para que la procuraduría sienta la necesidad de presentar un culpable lo más pronto posible.

Mauricio Marichal, de 30 años, era sobrino de Julia, y trabajaba para ordenar el archivo Juan de la Cabada, padre de Julia y quien fue un relevante escritor e intelectual.

Mauricio fue arraigado. El procurador Miguel Ángel Mancera informó que “es investigado por los objetos que se le encontraron entre sus pertenencias como bolsas de plástico, cinta canela, un cuchillo y un cúter”.

Sin embargo, la declaración de Mancera es, en el mejor de los casos, imprecisa. Estos objetos fueron hallados en el hogar de Julia Marichal, en el archivo donde Mauricio trabajaba. Pero Mauricio no vivía ahí; no se hallaron estas cosas en su mochila, ni en su hogar.

La Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal formuló medidas precautorias dirigidas al juez que emitió la orden de arraigo contra Mauricio. Si bien, sólo un juez puede determinar si Mauricio es culpable o inocente, todos debemos exigir un proceso justo, porque cualquiera puede verse involucrado en una situación similar. Basta recordar el caso de la estudiante Mariel Solís, quien fue presentada a los medios acusada de homicidio, y posteriormente se demostró su inocencia.

La familia de Julia y Mauricio ha estado marcada por el talento, pero también ha sido víctima de la violencia con anterioridad. Diez años atrás, otro primo de Mauricio fue asesinado. Nunca hallaron al culpable.

PD

Las otras víctimas del asesinato de Julia fueron sus mascotas: 4 perros y 4 gatitos pasaron casi 10 días sin comida o agua, ya que las autoridades impedían su auxilio. Finalmente, defensores de los animales solicitaron el apoyo de Hugo Camacho, jefe de la Brigada de Vigilancia Animal de la SSP del GDF. Los perritos fueron felizmente rescatados. Pero los gatos de Julia se escaparon; nadie sabe dónde están.

*Columna "Rendija" publicada en el Universal Gráfico el miércoles 14 de diciembre de 2011.




Leer también: "Marichal y el elefante"

domingo, 11 de diciembre de 2011

La desaparición de Fanny



*Texto publicado originalmente en Milenio Semanal.


Una noche de hace siete años Silvia Stephanie Sánchez fue aparentemente secuestrada. Hasta hoy se ignora su paradero. Ante la indolencia de las autoridades, su madre prosigue su búsqueda.


Lydiette Carrión

A siete años de que su hija Fanny fuera raptada, Silvia Elida Ortiz está cansada. Pero las mantas que ha colocado por la ciudad de Torreón aún le ruegan a su captor: “Sabemos que las autoridades no harán nada... Que nos deje verla si está viva. Si le hizo un daño mayor que me lo diga también. Ya no le diremos nada. Sólo déjanos verla de nuevo”.

El cinco de noviembre de 2004, Silvia Stephanie Sánchez-Viesca Ortiz, entonces de 16 años, salió de un juego de basquetbol en el Colegio Español. Para devolver un discman se dirigió, con su mochila rosa en forma de conejo al hombro, a casa de un amigo del barrio donde había vivido hasta un par de meses antes, cuando se mudó junto con su familia a las afueras de Torreón. No lo encontró. Se dirigió a casa de otra amiga del rumbo y le pidió dos pesos a la mamá para el camión de regreso: le habían robado su monedero en la escuela. La señora vio a la chica dirigirse hacia la parada de la calle 28 y Matamoros. Eran cerca de las 20:30 horas. Desde entonces nadie sabe de ella.

La hipótesis más aceptada por las autoridades federales apunta a que Fanny fue secuestrada por gente del crimen organizado y vive actualmente como mujer de algún mafioso, aunque no se descartan otras líneas de investigación.

En marzo de 2010, Alicia Elena Pérez Duarte y Noroña, titular entonces de la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos Relacionados con Actos de Violencia en Contra de las Mujeres (Fevim), describió la historia de Fanny como un caso “paradigmático”. Frente a medios locales, Pérez Duarte declaró: “Hasta donde yo lo conocí no es un asunto de tráfico propiamente, pero es muy similar a eso sacar a una niña menor de edad de su medio para que sea compañera, concubina de una bola de mafiosos”, dijo, y añadió: “¿Para qué se la llevaron? Para ser la concubina de uno de estos desgraciados. A mí no me pueden decir que ella se fue sola”.

VICIADO DE ORIGEN

Uno por uno, los individuos señalados por las investigaciones como responsables del secuestro han sido vinculados con actos legalmente comprometedores o han sido asesinados. Alfredo García, El Gigio, falleció en una balacera en Nuevo Laredo, se relata en el Diagnóstico de las Condiciones de Vulnerabilidad que Propician la Trata de Personas en México, realizado por la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) y el Centro de Estudios e Investigación en Desarrollo y Asistencia Social en 2009, aunque el principal sospechoso es Jesús Ramón Ruelas García, El Moyo o Chuyín, quien hace unos años fue detenido en Nuevo Laredo por la portación de armas de fuego, de acuerdo con Silvia Elida Ortiz, aunque rápidamente fue puesto en libertad. El Moyo era sobrino de Rodolfo García Vargas, El Rudy, y de la hermana de éste, La Cony, quienes han sido señalados por medios locales como los responsables de abrir la plaza a uno de los cárteles de la droga en Torreón.

La misma noche en que Fanny desapareció El Rudy y La Cony preinauguraron el bar Club Fox en la esquina donde la niña fue vista por última vez. Había muchas camionetas con placas de Tamaulipas. En una de éstas, apuntan las investigaciones, se la llevaron.

En el diagnóstico referido se advierte que la encargada del bar tenía relación con “el comandante René de León, del Grupo Antisecuestros de Torreón, y que es tía del Moyo o Chuyín. La averiguación se vició y no tuvo frutos en el grupo antisecuestros, que por cierto tuvo un gran descalabro” cuando su director, Enrique Ruiz Arévalo, fue secuestrado el 15 de mayo de 2007 y no se volvió a saber de él sino hasta que apareció en un video, torturado y declarando sobre presuntos vínculos de autoridades locales con integrantes del crimen organizado.

El Moyo y miembros de su familia asediaban a Fanny cuando ella vivía en esa zona de la ciudad. Le gritaban cuando la veían en la calle y la llamaban “presumida” y “altanera” porque no les respondía. También la llamaban por teléfono. Seis meses antes de su desaparición, desde un coche, le sacaron fotografías. Una vez la defendió nada menos que el boxeador Marco Antonio Veneno Rubio, quien, al ser testigo del hostigamiento que sufría la niña en la calle, los increpó: “A ella no”. Y, por esa vez, la dejaron en paz. En otra ocasión Fanny fue a la tienda en compañía de un amigo de su hermano. Comenzaron a molestarla y el joven también trató de defenderla. Hasta que le rompieron el brazo.

PRIMEROS INDICIOS

El Moyo fue llamado a declarar. De acuerdo con el reportaje del periodista Quitzé Fernández, “La niña a quien se tragó la noche” —publicado en Semanario del diario localVanguardia en 2007—, Jesús Ramón Ruelas García declaró por primera vez el 27 de diciembre de 2004. Entonces El Moyo dijo que ese cinco de noviembre de 2004 había estado en el Sams Club haciendo compras con su esposa. Pero durante su segunda declaración, el 29 de octubre de 2005, aseguró que sólo había dicho eso por presión de las autoridades. Testigos que presentó El Moyo en descargo desmintieron posteriormente haber estado con él la noche del cinco de noviembre.

La procuraduría estatal inició hasta 2006 la averiguación previa L1-AE-004/2006. Con el paso del tiempo formularon tres hipótesis: que Fanny fue asesinada y sepultada en el fraccionamiento San Rodolfo, propiedad de El Rudy, en Torreón; que es víctima de explotación sexual comercial y, finalmente, que fue secuestrada para ser pareja de un importante líder de la delincuencia organizada. Esta última versión ha sido fortalecida por las investigaciones federales.

Hasta mayo de 2007, tres años después de su desaparición, la entonces Fevim (ahora Fevimtra) atrajo por fin la investigación para dar con Fanny. Ese mismo año miembros de la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO) que participaban en el caso se trasladaron a Torreón. Un día, relata Silvia Elida Ortiz, los agentes se fueron a comer unas gorditas. Cuando regresaron al carro les habían dejado un sobre en el parabrisas. Dentro había una foto con un mensaje: “Ya no la busquen, ya no se llama Stephanie. Ahora se llama Claudia”.

Silvia Elida Ortiz explica que se hicieron estudios de la fotografía y determinaron que sí se trataba de Fanny. “Sin embargo, yo no la reconozco”, dice la madre. En septiembre de 2007 Alicia Pérez Duarte les informó que Fanny había sido ubicada en un condado de Texas, Estados Unidos, y que era madre de una niña. Agentes federales incluso dijeron verla en persona. Sólo los separaba una calle. “Ella (Pérez Duarte) me dijo: ‘Tu hija la tiene uno de los jefes del cártel. La tiene como su mujer’. Y yo le dije: ‘Pues tráiganla’. Pero me respondieron que era muy peligroso”. Y añade: “¿Cómo pueden decirme eso? ¿A quién recurro entonces?”.

En el mes de octubre Pérez Duarte citó a los padres para pedirles que arreglaran sus papeles para viajar a Estados Unidos. Pero cuando todo estaba listo la fiscal les dijo que esperaran un poco más, que iba a solicitar apoyo de Eduardo Medina Mora, en ese entonces titular de la Procuradoría General de la República. La ayuda nunca llegó.

En diciembre de ese 2007 la madre de Fanny le envió un mensaje de texto a la fiscal y ésta le regresó el nombre de la comunidad en la que se suponía se hallaba Fanny: Pharr, Texas. “Vayan ustedes”, decía el mensaje. Y los padres fueron, solos y con sus medios personales. Pharr resultó una población de 46 mil personas. No encontraron nada. De regreso a México, cuando intentaron comunicarse con Pérez Duarte, se enteraron que había renunciado.

Texas no fue la única línea de investigación de las autoridades federales. En agosto de 2007, la SIEDO envió el oficio número SIEDO/UEIS/7882/2007, donde se informó que un testigo había tenido comunicación con una persona que se hizo llamar Jenny y cuyos rasgos físicos eran los de Silvia Stephanie, en el negocio One Mart, ubicado en la Avenida 71, Indian School, en Phoenix, Arizona, aunque la familia jamás lo supo. Hoy la Procuraduría de Coahuila lleva el caso. Desde 2008, Fevimtra sólo es coadyuvante.


MUERTE EN EL DF

Desde hace unos unos cuatro años las autoridades le dijeron que buscaban a Rodolfo García Vargas, El Rudy, tío del principal sospechoso y dueño del bar en cuyos alrededoresFanny fue vista por última vez, explica Elida Ortiz,. Pero el nueve de julio de 2009, El Rudy, entonces de 40 años de edad, fue asesinado en la Ciudad de México. Entonces los medios reportaron que las autoridades lo encontraron agonizando al interior de un domicilio en la colonia San Juan de Aragón, delegación Gustavo A. Madero. Había sido baleado en la cabeza, una pierna y un brazo. Fue trasladado al Hospital General Balbuena por la ambulancia A8066 del ERUM. Murió minutos después. Junto a él había un recado que decía: “Pinole por harina”. Las autoridades lo atribuyeron a un asunto de drogas, pero en la casa había una serie de fotografías de una mujer descuartizada. La Fiscalía de Homicidios de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal lleva el caso de El Rudy; en tanto, Elida Ortiz advierte que hasta la fecha las autoridades a cargo de investigar la desaparición de su hija no han tenido acceso a esas fotografías: la policía del Distrito Federal no se las ha dado.

“A mí estas cosas no se me hacen razonables”, dice Silvia Elida. “Entiendo que cada estado tiene libertad de investigación. Pero aquí estamos hablando de delincuencia organizada”. Apenas hace ocho meses agentes trasladaron a la mamá de Fanny a las oficinas de la SIEDO en la Ciudad de México para reconfirmar declaraciones, datos y nombres de posibles responsables. A estos últimos ni siquiera los han llamado a declarar.

Así llegó el séptimo aniversario del secuestro de su hija. A la familia Sánchez-Viesca Ortiz sólo le quedó poner sus lonas en Torreón, con un mensaje a los responsables. Una de ellas fue colocada en el lugar donde desapareció su hija y otras dos en las salidas de la ciudad. La primera no duró más que un día. Alguien la retiró: los familiares de los presuntos responsables siguen viviendo en esa zona.

EL PEOR DESENLACE

“Yo tuve a mi hija hasta los 16 años”, dice Silvia. “Yo sé quién es mi hija hasta los 16 años: una muchachita que estaba en su casa, que odiaba que le tiraran piropos. Ella mandaba al carajo a los muchachos. Era una chamaquita que tenía miedo de tener una relación; demasiado seria, que ni siquiera bailaba en las fiestas”.

Silvia Elida relata que los hermanos de Fanny le dicen: “Hay que ser positivos”, cuando ella externa la posibilidad de que su hija esté muerta. “Sí, hay que ser positivos”, añade la mamá. “Pero ella no hubiera aguantado esa clase de vida. Sé del síndrome de Estocolmo. Ella (podría) estar con un canijo que la tuviera bien sometida. Pero también pudo estar con un canijo que la pudo haber matado. Y, bueno, me dicen las autoridades: está viva. ¿Cómo se atreven a decir que está viva y no me la traen?”.

“Con estos señalamientos, ¿no le da miedo que pueda haber represalias contra su familia?”, pregunta la reportera. “¿Tú crees que yo tengo miedo? No tengo miedo. Ni mi familia tiene miedo. Pero a la fecha no creo que (a los responsables) les vayan a hacer nada. La maestra Teresa Ulloa, de la Coalición Regional contra el Tráfico de Mujeres (y Niñas en América Latina), me está ayudando con el caso. Independientemente de eso, yo voy a seguir pegando mantas en esta área”.


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Coahuila, zona del silencio

Reportaje: Fanny, la niña a quien se tragó la noche. Vanguardia Por Quitzé Fernández.


viernes, 9 de diciembre de 2011

DF: Batallas por el agua




*Columna publicada en El Universal Gráfico el Miércoles 8 de diciembre de 2011



Dicen que, en el futuro, las guerras en el mundo serán por el agua. En la Ciudad de México han comenzado los primeros escarceos.

Está el caso de Iztapalapa, de la que literalmente bebió la ciudad de México (pues el agua se extraía del subsuelo de la demarcación) durante muchos años. Ahora, en época de estío, cada día se vuelve una batalla por conseguir los litros mínimos necesarios para beber, mantener una casa medianamente limpia, lavarse...

Quizá sea el caso más conocido. Pero no es el único. En el sur de la ciudad se encuentran el Ajusco y sus pobladores: una mezcla de pueblos originarios y asentamientos más o menos irregulares, regiones semi rurales; algunos fraccionamientos clasemedieros; y un par de enormes mansiones.

El nombre Ajusco proviene de la palabra náhuatl “Axochco”, que significa floresta de Agua. El parque nacional del Ajusco sigue siendo una importante zona de recarga de mantos acuíferos; si bien ha sido deforestado.

En los años setenta, que comenzaron a multiplicarse los asentamientos en esa zona, se inició la construcción de tuberías para proveer agua potable a la zona. Sin embargo, éstas nunca se terminaron. Quizá era demasiado caro inviable. Lo cierto es que quedaron ahí, a la intemperie, arterias que llegaban a ninguna parte, relatan los vecinos. Desde entonces, hace cuarenta años, cada semana, o cada tercer día, pipas de agua suben a abastecer a los habitantes.

La semana pasada, los pobladores del Ajusco y los piperos unieron causas; cerraron la carretera México-Cuernavaca para exigir a la delegación Tlalpan, que saldara el adeudo de seis meses que tiene con los piperos y, de paso, les aumentara la paga, ya que el combustible se ha encarecido demasiado. Los manifestantes se enfrentaron con policías, debido al cierre de la carretera. El resultado, anunciaron autoridades dos pobladores y 26 policías heridos.

A raíz de la trifulca, las autoridades se comprometieron a pagar los adeudos. Pero lo cierto es que ninguna administración -priista o perredista- ha atacado el origen del problema: la instalación de tuberías de agua potable y contención efectiva de los asentamientos en áreas naturales.

El de Tlalpan es un caso más de los diversos fenómenos que cada vez se acentuarán más en la Ciudad de México: estiaje, escasez de agua y, paradójicamente, inundaciones y hundiemientos. Se trata no sólo de un problema ecológico o de servicios. La provisión de agua es un asunto de seguridad nacional. El Distrito Federal será el epicentro.


* Twitter @lydicar

jueves, 1 de diciembre de 2011

Tortura en Tepito, ¿un hecho aislado?




*Columna "Rendija" publicada en El Universal Gráfico el 30 de noviembre de 2011.

El caso del operativo en Tepito -el sábado 19 de noviembre- evidencia las redes de crimen organizado instaladas en el que es quizá el barrio más antiguo de la Ciudad de México. Pero también describe otra plaga: la práctica de la tortura en la Ciudad de México.

Cinco policías han sido detenidos a raíz de un video que mostraba a servidores públicos haciendo “pocito” a detenidos. Vecinos y autoridades han advertido que los policías se encolerizaron, porque uno de sus compañeros que participó en el operativo recibió un balazo en el rostro.

El titular de la SSP capitalina, Manuel Mondragón ha asegurado que el de la tortura en Tepito es un caso aislado. Los organismos de derechos humanos no lo consideran así.

De acuerdo con Mario Patrón, primer visitador de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF), este año se han emitido dos recomendaciones por tortura, y están en proceso otras tres (Desde 1994 a la fecha, ha emitido 37 recomendaciones similares).

Entre 2010 y lo que va de 2011, se han acumulado 141 expedientes por tortura en la ciudad.

A pesar de que el DF tiene normas progresistas al respecto, “el patrón común en estos casos es la impunidad” advierte Mario Patrón”.

Como muestra un botón, relatado en la recomendación 8/2011 de la CDHDF: el caso de Yasser Serna Flores, Sinhué Peralta Gómez y Oscar Barrera Reyes, quienes fueron detenidos de forma ilegal y torturados por seis policías judiciales en mayo de 2008.

Los policías les exigieron dinero para dejar de torturarlos. Los golpearon desde el momento de la detención hasta su puesta a disposición ante el Ministerio Público. Los jóvenes permanecieron en el reclusorio ocho meses, antes de ser exonerados.

Hasta el momento, el caso se encuentra impune.

De los seis policías involucrados, dos fueron destituidos por el Consejo de Honor y Justicia. Aunque se quedaron sin trabajo, no fueron sancionados penalmente. Otros dos agentes son procesados por el delito de extorsión, por otros hechos. Un quinto policía ya fue jubilado, relata Mario Patrón.

Ninguno fue procesado por el delito de tortura. La procuraduría capitalina sólo emitió una consignación a un juzgado de paz por delitos “contra la procuración de la justicia”. Pero el juez regresó el expediente por no estar debidamente integrado.

Con el caso de Tepito, las autoridades del Distrito Federal tienen la oportunidad de demostrar que pueden acabar con la impunidad.


Para leer más: "Un mall para Tepito?"

¿Un "mall" para tepito?


*Columna "Rendija", publicada en El Universal Gráfico el 23 de noviembre de 2011


Tepito se debate entre balas y proyectos para centros comerciales.

El sábado 19 de noviembre, una balacera entre presuntos delincuentes y elementos de la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal (SSP-DF), dejó como saldo dos personas muertas, 13 detenidos -uno de ellos menor de edad y otro lesionado- y dos policías heridos de gravedad.

Nueve de los detenidos fueron remitidos a la Procuraduría General de la República. Además, el procurador capitalino, Miguel Ángel Mancera, informó que una vez que entren en vigor las reformas a la Ley de Extinción de Dominio del DF, se analizará la posibilidad de expropiar la vecindad donde ocurrieron los hechos.

Mientras, en los pasillos del GDF, se conversa sobre un posible plan para desarticular la mecánica de violencia y narcomenudeo que existe en uno de los barrios más antiguos y emblemáticos de la ciudad: cambiar el perfil socioecónomico del barrio bravo.

Agustín Torres, delegado de Cuauhtémoco relata que, si bien, nadie ha presentado en su escritorio un estudio por escrito para transformar Tepito (como sí hay para otras colonias), sí ha escuchado conversaciones al respecto en el GDF. Incluso, se ha planteando que este cambio tenga como columna vertebral la construcción de varios centros comerciales.

Los predios que podrían ser enajenados a raíz del incidente del sábado pasado serían los números 17, 21 y 25 de Tenochtitlán, según vecinos de Tepitos. Una vecina del barrio, Rosario, señala que algunos de estos espacios ya habían sido expropiados en el 85, después del temblor, debido a que sufrieron daños estructurales. En ese momento, casi el 60 por ciento de los espacios habitacionales de Tepito pasaron a ser propiedad del entonces Departamento del Distrito Federal. Sin embargo, en la operación, muchos de sus antiguos dueños se quedaron sin nada.

A esto se suma el anuncio que hizo Protección Civil en octubre pasado: el GDF acordó facilitar la expropiación de todos aquellos inmuebles que se encuentran en situación de alto riesgo sísmico. Entre las colonias contempladas se encuentran: la San Rafael, Guerrero, Santa María, y, por supuesto, Tepito.

Si bien esto puede ser una respuesta a un problema real de delincuencia y crimen organizado, también afectaría de forma directa a los habitantes de Tepito que viven de forma honesta. Tepito es uno de los barrios más antiguos no sólo de la ciudad, sino del país (algunos cronistas advierten que existía ya desde la época prehispánica), que ha conservado la estructura clásica de la vecindad: espacios comunes y fuertes vínculos sociales entre los vecinos. Cuna de boxeadores y emprendedores, ha sido afectada de forma cada vez más profunda por la violencia y la corrupción que acompaña a la delincuencia organizada. ¿Existirá una forma de combatir este problema sin afectar estas raíces y el orgullo de sus habitantes?

miércoles, 16 de noviembre de 2011

jueves, 20 de octubre de 2011

Cocodrilos en el metro






El pasado viernes 14 de octubre, miembros de los llamados “Guerreros” del Colegio de Bachilleres 6 subieron a la línea ocho del metro en la estación del metro Constitución 1917. Cuando el tren se detuvo en Iztacalco, fueron atacados por otro grupo de porros llamados “Cocodrilos” del Bachilleres 3, quienes lanzaron petardos en los andenes del metro. Resultaron heridas cinco personas que nada tenían que ver.

Es posible identificar a cada grupo porril por las playeras o jerseys que portan, y que son visibles en los diversos videos que se han hecho públicos, tanto por autoridades, como por particulares.

Si bien los ataques y batallas porriles son cotidianos, el hecho de que los “Cocodrilos” aventaran petardos al interior de los andenes del metro le dio un carácter más grave y peligroso al asunto.

Los Cocodrilos pertenecen a un grupo porril más grande, la Organización Democrática de Estudiantes Técnicos (ODET), quienes tienen su origen desde 1975. La ODET nació vinculada al extinto Partido Socialista de los Trabajadores (PST), que era una organización satélite del PRI. Muchos de sus líderes, por cierto, ahora se encuentran en el PRD.

Los porros de todas las escuelas se distinguen de otras bandas de estudiantes y jóvenes porque en mayor o menor medida reciben protección, ya sea de un partido político, las propias autoridades escolares, o, más recientemente, de algunos grupos de la delincuencia organizada y el narcomenudeo local.

Si bien un número considerable de estudiantes se puede ver involucrado en un grupo porril por desorientación, o por la necesidad de los adolescentes de pertenecer a un grupo, los líderes de los porros no son ingenuos y logran lucrar con su capacidad de convocatoria y movilización. Muchos de ellos han estado en la cárcel por delitos tan graves como el robo, lesiones y hasta homicidio.

A partir de los petardazos recientes, varios estudiantes y ex alumnos del Bachilleres 3 manifestaron en redes sociales su cansancio por ser presa de las trifulcas entre porros. Muchos advirtieron la necesidad de colocar seguridad a las afueras de su plantel, en particular cada viernes, que es cuando se incrementan los ataques.

Un apunte final. Llama la atención que las autoridades hayan liberado a los 20 implicados que originalmente retuvieron, cuando en otras ocasiones, frente a hechos similares (por ejemplo cuando la policía ha aprehendido a jóvenes en marchas estudiantiles) los detenidos han pasado meses en la cárcel, enfrentando un proceso legal.

*Columna publicada originalmente en El Universal Gráfico el 19 de octubre de 2011. No hay versión electrónica

lunes, 17 de octubre de 2011

La maldad femenina



*Imagen proveniente de este sitio

El “Monstruo de Iztapalapa” y su mujer

*Texto originalmente publicado en Replicante

Por Lydiette Carrión

Dicen que la violencia activa es masculina. Las estadísticas parecen confirmarlo. Pero ello no quiere decir que la maldad femenina no exista.

Una de las historias más leídas en los portales de noticias mexicanos al inicio de septiembre fue la del “Monstruo de Iztapalapa”. “En 2004 empezó la pesadilla de Clara”, decía un diario de circulación nacional.

Clara se enamoró de Jorge Iniestra Salas, doce años menor que ella. Le entregó sus ahorros, su sueldo íntegro como intendente de una escuela primaria y le entregó a sus hijas Gabriela y Rebeca, que entonces tenían catorce y doce años. También le dio la posibilidad de hacer lo que quisiera con su hijo Ricardo, de entonces diez años de edad.

Jorge sacó a las adolescentes de la escuela en 2006 y las mantuvo cautivas en la conserjería de la primaria en la trabajaba que su mamá. Al hijo de Clara, Ricardo, lo obligaba a trabajar como pepenador, y si no cumplía con una cuota determinada de dinero era obligado a dormir desnudo, con la cabeza en un charco de agua.

Clara accedió a dormir en un salón de la escuela, con su hijo, para que el marido estuviera solo con sus hijas. Pero no fue suficiente. Jorge Iniestra se llevó a las niñas a vivir a casa de su madre en junio de 2009.

El procurador de la Ciudad de México, Miguel Ángel Mancera, relató que al pequeño Ricardo, aunque no vivía ahí, era obligado a limpiar los desechos de sus hermanas. Clara dijo que no volvió a saber nada de ellas, hasta julio de 2011, cuando interpuso una denuncia por violencia familiar. Para entonces una de sus hijas, Gabriela, ya había sido asesinada.

En noviembre de 2009 Iniestra mató a golpes a Rebeca, que ya contaba 19 años. Para intentar revivirla, relató el “monstruo de Iztapalapa”, le colocó en el pecho a Ashley, hija de Gabriela, quien tenía tres meses de edad, con tanta fuerza que también la sofocó.

“El monstruo” y ¿la víctima?


Clara Tapia relata su versión de la historia, en una irregular rueda de prensa, en la que los detenidos contestan sin límite de tiempo a las preguntas atrabancadas de los reporteros: “Conocí a ese tipo que al principio se portó muy amable y decía que amaba a mis hijos y que a mí me quería. Al poco tiempo en verdad sacó lo que es: un maldito”.

En el circo de la prensa y la televisión Claudia lloró solamente en una ocasión: “Mi hijo Ricardo y yo comíamos de la maldita basura. Y él se la pasaba encerrado en el cuarto con mis hijas. Y nosotros le tocábamos: ‘Jorge, es que tenemos hambre’, y él nunca salía”.

En su relato parece asomarse la emoción de los celos. Clara añade: “Ese tipo nos hizo creer que todo era normal. Que él era de clase media, y que en la clase media ven la vida de otra forma. Que un hombre puede tener las mujeres que quiera”.

El procurador Mancera declaró a la prensa que el comportamiento de Clara se debe probablemente al llamado síndrome de Estocolmo. Al inicio de sus primeras declaraciones, dijo, lo poco que alcanzaba a articular es que al principio estaba muy enamorada de él.

“Yo tenía que hacer lo que él decía… porque decía que al que le hiciera algo a él o a su familia, él era capaz de matar. Y eso nos lo decía, dos o tres veces por semana”.

La omisión criminal, ¿por amor?
Existen pocos documentos sobre la complicidad de las madres en el abuso sexual contra sus propios hijos. Sorprendentemente, pocos artículos o estudios, si se tiene en cuenta la relativa frecuencia con la que pasa este fenómeno. Uno de los pocos textos hallados es el de un reportaje español que trata de explicarse un caso que conmocionó a España en 2008: una mujer arrojó ácido a su hija porque ésta llevó a los tribunales a su padre, quien abusaba de ella desde que tenía tres años.

La abogada de la joven víctima, se cuenta en el reportaje, advierte: “Las madres cómplices son excepciones. Pero eso no te deja tranquila, porque es una excepción mientras no te toca y son excepciones que existen”.

En muchas ocasiones, continúa el texto, la madre calla o solapa a un violador por razones económicas, sociales. El hombre es el único sustento de la familia. En otras ocasiones puede más la vergüenza… y, sin embargo, no es posible dejar de pensar que existe por lo menos un poco de lo que en Occidente se conoce como maldad cuando una madre decide entregar a sus hijos.

Maldad femenina
De acuerdo con los estudios sobre asesinos seriales, la gran mayoría de estas bestias míticas de nueva generación son hombres. Un porcentaje mínimo se compone mujeres, y de éste, una parte considerable se trata de mujeres que actúan en mancuerna con sus parejas.

Cuando se revelan casos de mujeres asesinas, si bien en general causan un escándalo inicial, pronto son olvidados por la prensa. El mundo del entretenimiento tampoco parece estar interesado en ellas. No hay asesinas trascendentes en el cine, como Hannibal Lecter. Los pocos asomos son versiones grotescas y caricaturizadas de la historia de la prostituta criminal, como el caso de la estadunidense Aileen Wuornos, llevado al cine. Parece que para ser una mala mujer hay que ser prostituta. Las madres, aunque sean asesinas, no lo son.

En su texto Aproximación al perfil de la mujer asesina en serie, las psicólogas Sandra Milena Arango Agualimpia, de la Universidad Católica de Colombia, y Andrea Guerrero Zapata, de la Universidad de Los Andes, advierten que “las mujeres cometen sólo 15 por ciento de todos los crímenes violentos y 28 por ciento de todos los crímenes. Pero las mujeres tienden a abusar de aquellos que dependen de ellas: las mujeres son las responsables de la mayoría de los homicidios de lactantes y niños, de la mayor parte de los malos tratos físicos a niños y de la cuarta parte de los abusos infantiles, según el estudio citado.

Incluso cuando se destapan hechos de esta naturaleza, el público parece poner más atención a su pasado como víctima que como agente activa del mal. Y es que la mujer, cuando delinque, suele considerarse víctima a sí misma y usa esto en su defensa: “Se sienten autorizadas a utilizar la violencia ya que les han inculcado profundamente la idea de su propia victimización. En cuanto al síndrome de la mujer maltratada, que supuestamente actúa para evitar agresiones previsibles, en realidad, todas las personas que comenten un crimen violento suelen considerarse a sí mismas amenazadas, incluso los asesinos en serie” [en el estudio citado].

Esta tendencia social a cerrar los ojos ante lo que se puede llamar maldad femenina es ilustrada en la última gran historia de horror del Distrito Federal, la referida del “monstruo de Iztapalapa”.

Medios y autoridades se ocuparon en detallar la maldad homicida de Jorge Antonio Iniestra Salas, de 32 años, acusado de los delitos de secuestro, homicidio calificado, homicidio en razón de parentesco, lesiones calificadas en razón de parentesco, corrupción de menores, trata en su modalidad de explotación laboral de menores y violencia familiar.

Los medios olvidan que el “monstruo” no actuó a escondidas. Su madre, Soledad Salas Torres, de 55 años, y sus hermanas Claudia, de 29 años, y Ana Laura Iniestra, de 28, vivían en el hogar en el que murieron Rebeca y la lactante (así como su hermano Juan Carlos, de 31 años, y otro pariente: un menor de edad de catorce años). La madre del monstruo declaró que no se metían en la vida de Jorge porque lo quieren mucho. Clara permitió que violaran a sus hijas en su hogar y que sufrieran todo tipo de vejaciones durante por lo menos cinco años. Lo permitió, dice, por amor.

jueves, 6 de octubre de 2011

Las CARI, hace un año

Se trata de una entrevista que se mosqueaba en mi computadora. Primero la propuse en una revista, luego el tiempo me comió la entrega. Luego estuve en otros temas. Ahora, que los medios vuelven a hablar de anarquistas en el Distrito Federal, creo que es oportuno desempolvarla y presentarla (sin nada de edición), antes de que vuelva a quedar sepultada en mi desorden laboral.

Aclaro que hubo dos preguntas que las CARI optaron por no responder. Una sobre su postura, lejanía o cercanía a grupos de corte marxista. La otra pregunta quedará como información reservada.



--De acuerdo con lo que he leído en sus comunicados, son el grupo más cercano a un anarquismo encaminado a movimientos sociales. No reivindican necesariamente el concepto de ecoanarquismo, el cual sería el más popular (aparentemente) entre los jóvenes mexicanos que han optado por abrazar esa ideología.

Sí pues por ese lado podríamos decir que las CARI/PGG somos una organización clandestina que nos manejamos con base en la afinidad, practicando y llevando un anarquismo colectivista-individualista-individualista-colectivista; ya que para nosotr@s no existe diferencia entre estas dos posturas pues pensamos que se retroalimentan por sí mismas.

Para nosotr@s es importante que exista una organización social que se [fundamente] más bien en los principios libertarios de organización y que esta organización no sólo se estanque en consignas y marchas de petición; sino que se radicalice de modo que derive en una organización que no abogue por reformas; sino que, desde la base y desde el aquí y ahora, se disponga a construir un mundo autónomo y libre. [Es decir, que implemente la] autonomía a nivel de individu@ y de comunidad pero que también se disponga a destruir el estado actual de las cosas, que no es más que la dictadura del capitalismo.

Esa organización y ese mundo libre los debemos construir, no con discursos vacíos como si fuéramos cualquier político, sino que se debe construir en la práctica misma, en la vida cotidiana, desde el cambio individual; es decir, sacando de nuestras personas los vicios de la sociedad como el machismo, el sexismo, la homofobia, el autoritarismo etc. no enseñando sino mas bien impulsando y contribuyendo a un verdadero cambio.

Por otro lado para nosotr@s también es de suma importancia la destrucción de lo que nos oprime, de lo que nos explota y nos intenta transformar en sus esclav@s del capital y de sus vicios sociales, en esclav@s del trabajo, de la moral burguesa. Para nosotr@s es importante impulsar la insurrección colectiva, así como practicar nuestra insurrección individual, porque no estamos dispuest@s a seguir soportando sus humillaciones, sus torturas, sus golpes, su mundo mercantilizado, porque sabemos que cada ataque vengativo contra la policía o sus instituciones es un ataque solidario con quienes están tras las rejas por luchar, independientemente de que o porque están pres@s, cada ataque es un claro mensaje a l@s poderos@s de que cada abuso, tortura, encarcelamiento o destrucción de la naturaleza será devuelto con la misma fuerza. Se acabo el tiempo de poner la otra mejilla para recibir el segundo golpe.

Esa construcción y esa destrucción depende de nuestro esfuerzo.

Sobre por qué no nos decimos eco-anarquistas. Es porque decidimos reivindicarnos solamente anarquistas como una identidad general del grupo, aunque también nos preocupamos por la destrucción de la naturaleza, en estos tiempos la lucha ecologista también se ha convertido en una consigna o lucha social, como por ejemplo la lucha contra la línea 12 del metro, la lucha contra la supervía poniente o las acciones emprendidas en Guerrero por la defensa de los bosques, de nosotr@s y de much@s otr@s ecologistas radicales (públicos o clandestin@s) depende que esta idea de ecologismo social avance y se radicalice así como en los métodos de lucha también.

Sobre los movimientos sociales, podemos decir que hemos aprendido de ellos así como también hemos tenido desilusiones, pero somos auto-críticos y en general decimos que [...] algunas cosas no son de nuestro completo agrado o afinidad pero tampoco queremos ser jueces y condenar algo que a nosotr@s no nos cuesta trabajo o desgaste llevar a cabo. Hemos estado en las insurrecciones sociales y lo continuaremos haciendo, contribuyendo en la medida de nuestras posibilidades y conocimientos a que el conflicto se expanda y de golpes mas fuertes, claro siempre con el rostro cubierto símbolo de la clandestinidad que amenaza al estado.

Que quede claro, nosotr@s no pretendemos organizar a las “masas” ni dirigirlas, ni defenderlas, sino más bien contribuir a la organización y mostrar una orientación y una propuesta absolutamente libertaria.



--¿Cuál es su postura respecto a los grupos ecoanarquistas?

Pues en general pensamos que es necesario que existan grupos que luchen de manera objetiva contra la destrucción de los ecosistemas, ya que nosotr@s también pensamos en general que un mundo libre no podría existir si todavía se practica la explotación y el dominio sobre animales y naturaleza.

Por eso es necesario que grupos de sabotaje y acción directa trabajen a fondo el tema de la ecología, de una manera meramente objetiva como sucedió por ejemplo con la operación Bite Back del ALF de Estados Unidos y Rod coronado en donde con base en estrategia, técnica y objetividad se logró atacar la industria de la explotación animal dando una serie de golpes certeros a centros de investigación; y ocasionando con ello pérdidas irrecuperables de mas de 30 años de información obtenida a partir del asesinato de miles de animales y además de los daños físicos a los inmuebles que albergaban dichas instituciones. Por esta operación, la industria de la peletería estuvo al filo de venirse abajo.

Otros ejemplos podrían ser las acciones contra campos de experimentación de transgénicos, bio y nano tecnología, sabotajes realizados alrededor del mundo como en Suiza o Alemania, o campañas objetivas que han rendido muchos frutos como la campaña SHAC en Inglaterra que combina toda una serie de estrategias en acciones tanto públicas como clandestinas y que de este modo el laboratorio de vivisección contra el cual se dirige la campaña que es Huntington Life Sciences que ha estado a un pelo de claudicar, esta campaña es una mezcla de acciones descentralizadas y objetivas tanto publicas como clandestinas.

El movimiento por la liberación de la tierra en muchos países fuera de México nos ha ensañado que con estrategia, objetividad, dirección y sobre todo una reivindicación directa centrada y bien dirigida se puedo lograr mucho. Nosotr@s tomamos de esto lo que nos parece importante.

--¿Cuál es su postura frente a los movimientos de solidaridad entre anarquistas de varias naciones?

Claro que esto está muy bien. En los últimos años se ha incrementado en un fuerte nivel, tanto de calidad como de cantidad las acciones solidarias entre anarquistas en el mundo.


Para algun@s esto puede parecer algo nuevo o algo que se está poniendo de moda, pero recordemos que en la historia del movimiento anarquista, acciones similares como las que se registran ahora se realizaron en la campaña de solidaridad con los anarquistas Sacco y Vanzetti quienes fueron asesinados por el estado norteamericano y que desde Italia hasta Argentina se realizo una fuerte campaña de solidaridad, marchas, meetings numerosos, pero sobre todo explosiones y atentados --como los realizados por Severino Di Giovanni en Argentina--formaron parte de las protestas.

En México en los tiempos finales del magonismo (por identificar de alguna manera la lucha anarquista de 1906 a 1911) cuando much@s en México y el mundo les negaron el apoyo, simplemente por mantenerse firmes en sus convicciones, también se manifestó la solidaridad internacional en la cual anarquistas reconocidos emitieron textos en apoyo a l@s anarquistas mexican@s y su lucha local, por ejemplo Enrico Malatesta. Todo esto, tanto en la historia como en el presente demuestran el carácter internacionalista del anarquismo, dejando en claro que no reconocemos fronteras ni bandera alguna mas que la que expresa la libertad, porque prensamos que para que un mundo libre exista, debe de haber el derecho de auto-determinación, pero también debe de haber abolición de las fronteras. En México y el mundo se ha demostrado que cuando alguien sea asesinad@, encarcelad@, torturad@, en cada lugar donde halla gente libre se atacaran los intereses de los gobiernos internacionales, e incluso atentados contra los representantes políticos de las naciones se verán venir. Para nosotr@s como anarquistas revolucionari@s que somos la solidaridad no solo se manifiesta en actos que recauden fondos monetarios para una u otra causa, para nosotr@s la solidaridad se manifiesta permanentemente, no es una lucha aislada, sino que la lucha misma. Emitimos solidaridad con la Federación Anarquista Informal de Italia, los grupos anarquistas griegos: Lucha revolucionaria, Conspiración de las células del fuego y La secta de los revolucionarios, Giannis Dimitrakis e individu@s ácratas pres@s por acciones individuales y con nuestr@s compañer@s revolucionari@s en Chile, Argentina, Barcelona, España y el resto del mundo.

--¿Cómo describen a su organización?

Somos una organización clandestina anarquista revolucionaria que nos organizamos bajo los principios ácratas, no mantenemos un método jerárquico ni centralista y mucho menos vanguardista de organización, nos preparamos física y psicológicamente para la guerra que está presente y para lo más difícil que está por venirse, no tenemos cargos militares y no los necesitamos porque estamos contra cualquier tipo de control y dominio, y porque confiamos en la responsabilidad que cada un@ de nosotr@s ha asumido individualmente y en nuestra responsabilidad colectiva, con el fin de organizar y contribuir al avance y el mantenimiento de esta organización anarquista insurgente.

--¿Por qué consideran que después de un año efervescente en anarquismo --como fue 2009--, ahora existe una especie de calma?

Al respecto pensamos que una de las causas de que el presente año se ha visto más seco en cuanto al accionar de los grupos anarquistas y eco-anarquistas es porque en el 2009 las acciones más fuertes de ese año se centralizaron durante todo el mes de Septiembre y en Diciembre en una sola noche se detonaron 13 explosivos siendo los más fuertes los de Toluca y Metepec. Pero si hacemos el conteo en este año se registraron más sabotajes que el año pasado. Otra causa es que en tanto la lucha anarquista se encrudeció, el Estado aumentó su control y parece ser que no tod@s están dispuest@s a arriesgarse por cosas pequeñas (importantes también), también los grupos parece ser que entraron en otra etapa de lucha mas fuerte y más directa. La lucha necesita de más estrategia y objetividad. De nuestra parte podríamos decir que también la preparación es un factor que toma tiempo, pero que rinde frutos y da pie a hacer cada vez cosas mejores.

--¿Lo achacarían a las detenciones, a la caída de diversos blogs que informaban sobre los movimientos o a otras causas?

Pensamos que por una parte las detenciones debilitan, porque es verdad que pensar en un compañer@ encarcelad@ duele, pero por lo que se ha demostrado las detenciones no han sido un factor que [impida que] la lucha continúe , sino mas bien algo que impulsa a continuar esta lucha también por la libertad de nuestr@s compas. Lo que el estado busca es que con pres@s en sus cárceles a l@s combatientes ácratas les dé miedo o que se centralice la acción en sólo por la libertad de l@spres@s, descuidando otros campos de la lucha, pero le salieron las cosas al revés. Al menos la parte anarquista ha demostrado que, en vez de hacer una lucha aparte es mejor incluir a l@s pres@s en la lucha misma. En Grecia por ejemplo durante el mes de noviembre-diciembre hubo redadas y detenciones y aun así el 30 de diciembre hubo una explosión de gran potencia en pleno centro de Atenas. Esto es la guerra social.

--¿Algo más que quieran agregar?

Nos gustaría exponer de alguna manera la situación degradante de violencia sexual en la que se encuentra la ciudad de México y el país entero, porque ese rollo de la socialdemocracia y de Marcelo Ebrad al que irónicamente llamaron el mejor alcalde del mundo por su supuesto apoyo a las mujeres es pura hipocresía permisiva, porque mientras se inventan leyes y más leyes de proteccionismo o de supuestas más libertades, por otro lado los mass media sensacionalistas siguen incitando y contribuyendo a la violencia sexual contra mujeres y homosexuales. Es degradante que cada día a manera de morbo se muestren [imágenes de cadáveres] sin cabeza, descuartizados y mujeres violadas o ultrajadas.

Esto en vez de crear conciencia sólo crea que cada día mas los sentimientos de misoginia aumenten. Esto en vez de mostrar la realidad que se vive en el país solo crea una realidad de acoso sexual, discriminación, patriarcado y misoginia, porque cuando por un lado el gobierno del GDF inventa leyes y organismos que beneficien a las mujeres, la dominación patriarcal sigue manteniéndose vigente gracias a este tipo de periódicos, revistas, vídeos y demás así el problema no se ataca de la raíz que es en la cultura y en los sentimientos de poder o de dominación. Por otro lado a este personaje de caricatura llamado Marcelo también se le dio ese membrete del mejor alcalde supuestamente por apoyar a las “clases desprotegidas”, cuando por otro lado, Marcelo Ebrad en vez de proteger a lo pobres los deja en la calle, desaloja gente de sus viviendas y destruye muchas hectáreas de hermosos bosques con la única finalidad de beneficiar al sector empresarial y a la ciudad de la vanguardia, o sea satisfaciendo sus planes especulativos como lo son la supervía poniente y la Línea 12 del metro. Apoyamos las movilizaciones de protesta contra la súper vía poniente.

Por otro lado sabemos que el corrupto procurador de “justicia” del Distrito Federal, [Miguel] Mancera ha puesto a l@s pres@s anarquistas bajo consigna dando todas las trabas posibles para que l@s pres@s salgan de las cárceles, alargando procesos, interrogándolos continuamente etc. Sabemos que Mancera está contra l@s anarquistas y los quiere aplastar a como dé lugar, sean de acción pública o clandestina. Un ejemplo claro fue la marcha del 2 de octubre, donde el cuerpo de Granaderos del DF intentó encapsular al contingente libertario e impedir su paso. Por eso en octubre pasado nos reímos en su cara y en la de sus inútiles policías al atacar un camión del represivo cuerpo de Granaderos. A Mancera le queremos decir que NO VA A PODER CON NOSOTR@S, que no va a poder parar la ofensiva y nos sentimos orgullos@s de que nos odie tanto. Él puede estar seguro ese odio es mutuo.

miércoles, 5 de octubre de 2011

Incendio en Walmart ¿De dónde vienen los anarquistas?

Columna publicada originalmente en El Universal Gráfico


El incendio en el Walmart de Buenavista, el pasado 30 de septiembre, volvió a poner de moda a los anarquistas.
El grupo denominado Conspiración de las células del fuego se adjudicó el incendio, y alegó que fue realizado en el marco de unas jornadas llamadas: “Septiembre negro”.
Las autoridades, por cierto, niegan que el incendio haya sido provocado. Sin embargo, en los últimos años, los anarquistas han realizado una serie de bombazos, atentados y acciones, por lo que es verosímil su autoría en el atentado.
¿Quiénes son los anarquistas en el DF?
Hay tantos anarquismos como anarquistas. Si bien pueden compartir una base de ideas comunes, sus conclusiones, sus prioridades, sus métodos varían de grupo en grupo, de célula en célula.
Hay anarquistas pacifistas y cristianos; otros que buscan filtrarse en sindicatos y otros movimientos, y también hay anarquistas que optan por las “acciones directas”: enfrentamientos directos con las autoridades. Hay quienes su prioridad son los temas sociales y los que están volcados en los problemas ambientales.
Desde los tiempos de la Revolución Mexicana ha habido anarquistas en México. Pero desde el año 2000 aproximadamente empezaron a tener más relevancia estos nuevos grupos ecoanarquistas vinculados con grupos similares en Grecia, Italia, España y Chile.
Hay algunos miembros de estas células que ya han sido encarcelados, acusados de haber participado en la colocación de explosivos. Todos son jóvenes, varios de ellos fueron aprehendidos cuando eran menores de edad. La mayoría ronda los 20 años.
De los ecoanarquistas en el DF, las llamadas Individualidades tendiendo a lo salvaje han destacado, ya que en agosto pasado se adjudicaron el envío de paquetes-bomba a investigadores; e hirieron con ellos al doctor Armando Herrera Corral.
En los temas sociales, hay grupos como las Células autónomas de revolución inmediata –Praxedis G. Guerrero” (CARI-PGG), que se adjudicó el atentado el pasado 23 de septiembre contra las oficinas de la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
En resumen, los anarquistas han estado presentes en los últimos años. Desde 2006 se intensificaron sus acciones. Cada año escalan sus acciones, cambian e intensifican sus métodos. Parece que llegaron para quedarse.

martes, 27 de septiembre de 2011

La joya y sus delicias

* Originalmente publicado en Replicante



Hay un acceso al país de las maravillas en Guerrero, cerca de Taxco. La Joya empieza como un hoyo en la tierra, anunciado por un considerable descenso en la temperatura. Del calor agobiante en la superficie se pasa a un frescor que podría ser gratificante si no estuviera repleto de mosquitos e insectos.

Ése es el primer indicio de que el ser humano no fue creado para caminar estos mundos. Pero no es el único. A diferencia de Alicia, el humano promedio debe equiparse: casco, arnés, cabos de seguridad, estribo, mosquetones, ascensores (llamados puño y croll) y descensores (marimba), rompevientos, provisiones. Pero sobre todo lámparas. Como en cualquier historia de aventuras, sin luz, sin su Earendil, el protagonista no pueda regresar a su hogar y quedará atrapado en una tierra hostil, en la hermosa y temible Faërie que describe JRR Tolkien.

A lo largo de las décadas, a La Joya ha bajado un número indeterminado de espeleístas y montañistas mexicanos, que quizá ascienda a millares. Montañistas expertos e inexpertos han tenido una probadita de las magias del país de las maravillas: un túnel serpenteante e interminable que muestra en techos y paredes formas fantásticas e imposiblemente bellas; estalactitas y estalagmitas, cortinas y pipas de piedra, animales y personajes que observan desde las paredes. Podrán conocer el llamado “Paso del Cocodrilo”, un sifón en el que deben sumergirse en agua achocolatada, como un cocodrilo: con apenas los ojos y las aletas de la nariz por encima del agua. Aunque hay ocasiones en que deberán hundirse por completo y sostener la respiración.

La Joya tiene unos tres kilómetros de distancia y 250 metros de desnivel desde el inicio hasta la sima. Además, hay cinco tiros o abismos, el último de sesenta metros; tiene zonas en las que es necesario escalar o desescalar. Es también preferida de muchos porque, si bien demanda cierto esfuerzo físico, no tiene muchas complicaciones de técnica. Una persona sin mucha experiencia recorre de ida y vuelta la parte más exuberante de la cueva en unas siete horas. Después del Paso del Cocodrilo (que se localiza aproximadamente a la mitad del recorrido) la cueva se torna más austera: una serie de meandros interminables hasta el último tiro, de sesenta metros. Muchos omiten “hacer sima” y se aventuran sólo un poco más allá de ese paso.

Pero La Joya ha cobrado sus muertos y heridos.

La Joya no puede ser visitada en época de lluvias. La cueva se inunda y las crecidas son cotidianas. El paso a la dimensión de las maravillas está cerrado hasta el siguiente periodo. Sin embargo, cada año, enmedio de la nada, la zona es visitada por nuevos y viejos espeleístas que tienen una probadita de Faërie.
Por ejemplo, el 26 de mayo de 2001, Martín, un joven de 23 años de edad, cayó en el último tiro, desde una distancia de veinte metros. Se rompió un tobillo y se fisuró la cadera. Le salvó la vida que se enredó con la cuerda, recuerdan rescatistas, y su caída se vio frenada. Desde que se lesionó su rescate tardó más de dos días e involucró a decenas de espeleístas y rescatistas, que tuvieron que armar una serie de mecanismos para subir la camilla por los cinco tiros, arrastrarla o cargarla en los meandros, sumergirla en los sifones, hacer malabares para transportarla en áreas de desescalada y estrechos pasajes. Debido a la hipotermia y la humedad que padeció en la cueva también adquirió una infección pulmonar.

Sin embargo, el suyo es considerado un rescate exitoso, que involucró a montañistas expertos de la UNAM y el Poli, entre muchos más. Se trató del primero que fue realizado exclusivamente por rescatistas y espeleístas mexicanos, y el joven se recuperó completamente.

Pero no todos los casos terminan así. Hace un par de años un grupo de montañistas se encontraba haciendo sus primeras prácticas en espeleísmo en La Joya. Pero en la superficie de la tierra se rompió un dique de agua en las inmediaciones. Esto derivó en una crecida al interior de la cueva: un golpe de agua inesperado que con su fuerza la inundó por minutos.

Un joven de dieciocho años se encontraba subiendo el segundo tiro (a unas pocas horas de salir de la cueva) cuando la crecida se presentó. Sus compañeros no saben si lo mató el golpe del agua, se ahogó o algo lo golpeó. El rescate del cuerpo tomó varios días también y fue realizado por espeleólogos de varias partes del país. Y es que ningún grupo de rescate institucional (bomberos, policía, cruz roja, Ejército) en México tiene la preparación adecuada para realizar un rescate en cuevas. Si uno se aventura al país de las maravillas no hay teléfonos de emergencia que sirvan.



Por ejemplo, relatan algunos montañistas, hace unos años un espeleólogo francés se accidentó en un sótano en la sierra de Puebla. Su embajada solicitó ayuda al grupo de espeleo rescate de la UNAM y al Ejército. Entre seis y ocho soldados comenzaron a bajar a rapel el primer tiro, con un descensor llamado “ocho”, el cual es utilizado sólo para tiros medianos y con cuerdas limpias (las cuerdas de espeleología, sucias, lo liman rápidamente, además de que el descenso en ocho no es tan controlado como la “marimba” de espeleología). Pero lo que es peor, ¡no llevaban ningún ascensor! Un espeleísta vio aquello y los detuvo. Les preguntó a los soldados cómo pensaban salir. Respondieron, de forma socarrona: “Por la salida”. Los soldados fueron enviados sin explicarles que tendrían que salir por el mismo lugar por el que entraron. Creían que al fondo de la cueva habría una salida a pie. Los montañistas tuvieron que prestarles ascensores; cortaron una cuerda y les improvisaron cabos de seguridad y estribos. Los soldados que iban a rescatar terminaron siendo rescatados.

La Joya no puede ser visitada en época de lluvias. La cueva se inunda y las crecidas son cotidianas. El paso a la dimensión de las maravillas está cerrado hasta el siguiente periodo. Sin embargo, cada año, enmedio de la nada, la zona es visitada por nuevos y viejos espeleístas que tienen una probadita de Faërie.

¿Por qué regresar? ¿Por qué descender? Quizá por la misma atracción que los desconocido ejerce sobre el alma humana. Por el impulso que ha lanzado al hombre, a lo largo de los siglos, a caminar esta tierra…

lunes, 12 de septiembre de 2011

Los tímidos pasos de la PGR en el caso Radilla

El pasado 29 de agosto México debió informar a la COIDH sobre los avances en la búsqueda de los restos de Rosendo Radilla, caso paradigmático de violación a los derechos humanos en nuestro país.

**Publicado originalmente en M Semanal




Crear un banco nacional de ADN para desaparecidos en la “guerra sucia”; indagar entre los muertos desconocidos de los cementerios locales de Atoyac, Guerrero; expandir las áreas de búsqueda con georadares a otras zonas del ex cuartel militar de esa localidad, y abstenerse o limitar el uso de maquinaria pesada en estas indagatorias, son las recomendaciones e ideas para dar con los restos de Rosendo Radilla. Sin embargo, las acciones de la Procuraduría General de la República (PGR) son limitadas. Ha pasado un año y medio y sólo se ha buscado, dos veces, en el mismo lugar.
El pasado 29 de agosto México debió informar a la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Coidh) sobre el avance en el cumplimiento de la sentencia dictaminada en el caso de Rosendo Radilla Pacheco, en la cual esa Corte declaró al Estado mexicano autor del delito de desaparición forzada en el contexto de la “guerra sucia” de los años setenta. Así, cuando pasen las lluvias de esta temporada, se realizará una tercera búsqueda de los restos de Radilla en el ex cuartel militar de Atoyac. Las nuevas excavaciones programadas fueron dadas a conocer de forma discreta. Un boletín institucional de la PGR anunció esta búsqueda en el ex cuartel militar de Atoyac, Guerrero.

Por primera vez un grupo de peritos especialistas del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) asesorará a la PGR en la búsqueda de posibles cementerios clandestinos y restos óseos. En el grupo de expertos estarán Mario Ramírez Cardona y José Antonio Zamora Téllez, peritos en materia de geología del Área Académica de Ciencias de la Tierra y Materiales de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH). Al frente del área de arqueología estará Osvaldo José Sterpone, de la Coordinación Nacional de Arqueología del INAH. Participarán también Jorge Arturo Talavera e Israel Dávila Lara Borges, también de esta institución.

“Los peritos actualmente utilizan dos aparatos que, nos dicen, son muy caros: el resistivímetro y el georadar”. Esos aparatos envían electricidad al subsuelo, con lo que obtienen una lectura de las irregularidades del terreno, explica en entrevista con M Semanal Sergio Méndez, abogado de la Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos (CMDPDH), organización que acompaña a los familiares de Radilla en el caso. La información obtenida es procesada y se puede hacer un mapa en tercera dimensión del terreno. “El perito nos explicó que hay 18 irregularidades divididas en cuatro o cinco zonas del mismo campo de tiro”. Pero se podría tratar de madrigueras de animales, troncos, piedras, etcétera; la segunda parte de estas indagaciones es excavar y ver de qué se trata.

LC: Hay versiones de que existen otras zonas en el ex cuartel donde también podría haber restos óseos y que allí no se está buscando.
SM: Obviamente el terreno es muy limitado, porque hay otras zonas en las que también podrían estar buscando.
LC: ¿Cuáles son estos otros espacios donde podría haber fosas clandestinas?
SM: Es posible que se encuentren restos enterrados debajo de la cancha de basquetbol. Otros dicen que pueden encontrarse restos debajo de la (actual) casa del presidente municipal. Hay distintas versiones, pero ahorita la PGR se ha circunscrito al campo de tiro. Inicialmente el campo de tiro se dividió en cuatro zonas, y posteriormente se agregó una “zona ampliada”, a solicitud de Tita Radilla, hija del desaparecido Rosendo Radilla.
Los peritos del INAH nos hicieron una presentación muy buena. Nosotros solicitamos esta información pero, al igual que el resto de la averiguación previa, sólo la podemos consultarin situ. Actualmente, la Suprema Corte de Justicia de la Nación atrajo un amparo para que los familiares de Radilla Pacheco y sus coadyuvantes puedan sacar copias del expediente.


TRASCABOS EN EL EX CUARTEL


Las primeras excavaciones se hicieron con maquinaria pesada, con trascabos, y se detectaron irregularidades. Pero esto podría ser contraproducente en las indagatorias: “Lo que nos explicaron los peritos del INAH es que no se tiene que excavar ni con palas, menos con maquinaria pesada. Se tiene que hacer con herramientas muy finas. Tienen que quitar con mucho cuidado la tierra. Es más, no puede haber más de dos personas, porque (incluso) el perito puede contaminar el resto óseo con una lágrima, con un cabello o con saliva. Entonces, tienen que ser muy cuidadosos con los restos óseos, porque como ya llevan mucho tiempo (en el subsuelo), es posible que se echen a perder y no se pueda analizar el ADN”, explica Sergio Méndez. El abogado reitera: los restos, de ser hallados, pueden estar en muy malas condiciones. “Nos dijeron que pueden parecer como mazapán, o pueden estar llenos de hongos, pueden estar fracturados o pueden estar dañados. Por esta razón, es indispensable que la excavación se haga por secciones, con herramientas muy delicadas”.

EL CAMPO DE TIRO

Leonel Paiz es perito de la Fundación de Antropología Forense de Guatemala (FAFG) y acompaña el caso de Rosendo Radilla a petición de la CMDPDH. De acuerdo a Paiz, el uso de trascabos no fue inadecuado en una etapa inicial, por el tipo de terreno y el gran espacio en donde había que buscar. Incluso ejemplificó con el caso de los restos en el genocidio de Bosnia, donde se trabajó inicialmente con maquinaria pesada, pero siempre bajo la observación expertos, lo que no fue el caso aquí. En su informe Paiz recomendó que la búsqueda de restos se extendiera a otras zonas del ex cuartel militar y sus alrededores, y no sólo se circunscribiera al campo de tiro; la determinación de indagar en el campo de tiro se hizo a partir de los testimonios varias personas. Sin embargo, como ha denunciado la Asociación de Familiares de Detenidos, Desaparecidos y Víctimas de Violaciones a los Derechos Humanos en México (Afadem), las autoridades militares no han aportado información interna sobre el paradero de Rosendo Radilla y otros desaparecidos.

Julio Mata, secretario ejecutivo de la Afadem, advierte en entrevista que “todo el caso es producto del trabajo de los familiares. Para nosotros no hay investigación real sobre los desaparecidos”. Todo el trabajo está basado en testigos aportados por los familiares y los peritajes de los antropólogos forenses, porque “la PGR se ha negado a citar a los responsables de las desapariciones forzadas”. Concluye: “Están buscando en lugares donde hay pocas probabilidades de encontrar algo”.

Leonel Paiz añade: se recomendó la expansión de la búsqueda “de acuerdo a nuestra experiencia, y de acuerdo también a los propios testimonios de las personas que vivían en el sector”. El guatemalteco advirtió que en docenas de casos similares se pueden hallar cementerios de este tipo no sólo al interior de un cuartel, sino en los alrededores de éste; es necesario poner atención en aquellos terrenos donde se presentaba vigilancia constante en los años en que se presentaron las desapariciones (en este caso, en la década de los setenta). Pero algunas de las zonas que tanto los testigos como los expertos guatemaltecos han sugerido para excavar ya tienen construcciones nuevas.

LC: De acuerdo a su experiencia, ¿cómo ve el avance de las indagatorias?
LP: Caminan un poco lento. Aunque a veces es así, un poco lento. Aquí en Guatemala llevamos desde 1992 (trabajando el tema de) cementerios clandestinos. Ya con el tiempo se han hecho manuales que agilizan el proceso, pero en general nosotros creemos que acá lo hemos hecho en muchísimo menos tiempo de lo que han sido los trámites para autorizar estas nuevas áreas (en México).
LC: ¿Cómo encuentra el proceso mexicano?
LP: Técnicamente van muy bien en el caso de Rosendo Radilla. Las personas que yo conocí, las vi con muy buena voluntad. En eso no creo que haya ningún problema. Pero me parece que se deberían agilizar las investigaciones, y no dejar pasar demasiado tiempo.

Otra recomendación del grupo guatemalteco en el caso de Rosendo Radilla es buscar en los cementerios legales a aquellos hombres y mujeres muertos no identificados de la época, “a los NN”. Esto no se realiza en México. Finalmente, recomendaron hacer un muestreo genético a nivel nacional, no sólo de Radilla Pacheco, sino de los cientos de desaparecidos de la época.
LC: ¿Cuánto costaría el muestreo?
LP: No te podría dar exactamente cuánto es el costo. Pero sí hay que hacerlo. Son cosas que aquí (en Guatemala) también se están haciendo y han funcionado.
El 19 de mayo de este año la Coidh emitió una primera resolución tras cumplirse el primer año de su sentencia en el caso Radilla. En ese informe la Corte determinó que el Estado había incumplido con todas las recomendaciones en el caso Radilla Pacheco, excepto con publicar extractos de la sentencia del caso en un diario de circulación nacional y en elDiario Oficial de la Federación. El Estado mexicano presentó un informe el 29 de agosto que detalla cómo va el cumplimiento del resto de los puntos —el pago de las indemnizaciones, la investigación—; pero el punto más importante, abatir la impunidad en delitos de lesa humanidad, sigue pendiente. “No han hecho una sola diligencia encaminada a castigar a los responsables de la ‘guerra sucia’”, señaló Sergio Méndez.

***


Caso paradigmático
El 25 de agosto de 1974, Rosendo Radilla Pacheco fue detenido en un retén militar. Fue visto por última vez en el ex Cuartel Militar de Atoyac de Álvarez, Guerrero. Radilla fue compositor y un líder social de ese municipio. En diciembre de 2009, la Corte Interamericana de Derechos Humanos halló culpable al Estado mexicano de diversas violaciones de derechos humanos en la desaparición forzada de Radilla Pacheco, caso ya paradigmático de la guerra sucia en México. La corte determinó que México violó los derechos a la libertad personal, a la integridad personal, al reconocimiento de la personalidad jurídica y a la vida de Radilla, además de los derechos a las garantías judiciales y a la protección judicial de sus hijos Tita, Andrea y Rosendo.


La sentencia y su cumplimiento




Entre otras cosas, la CoIDH determinó en 2009 que México debía localizar el paradero del señor Radilla Pacheco o, en su defecto, entregar sus restos mortales a los familiares. Este aspecto nodal de la sentencia sigue pendiente.

El Estado también debía limitar el fuero militar. En fechas recientes la Suprema Corte de Justicia de la Nación determinó que las violaciones a los derechos humanos cometidos por personal castrense deben ser juzgados por tribunales civiles (la Secretaría de la Defensa Nacional rechazó esta determinación). Si bien existe ahora la orientación de la SCJN, sigue pendiente una reforma al Código Penal militar.

La Coidh también determinó que un representante del Estado mexicano debía ofrecer disculpas públicas por los hechos de desaparición forzada y develar una placa conmemorativa por el caso de Radilla Álvarez en Atoyac de Álvarez. Hasta la fecha, relató Julio Mata, la develación de la placa y las disculpas públicas se siguen discutiendo.

La CoiDH ordenó que se entregue un monto de dinero a los familiares de Rosendo como una medida de reparación del daño. La PGR anunció en días recientes que este monto ya se encontraba en un tribunal, listo para ser entregado.

El 29 de agosto pasado, el Estado mexicano debía presentar un informe a la Corte Interamericana de los Derechos Humanos sobre el avance en el cumplimiento de la sentencia en el caso Radilla. Hasta el 31 de agosto, los familiares no habían sido notificados si dicho informe fue presentado o no.

Sin embargo, esto no quiere decir necesariamente que México fue omiso. Puede deberse a que la notificación a los familiares se ha retrasado por parte de la misma CoIDH o que México solicitó una prórroga.

El de Rosendo Radilla es un caso que avanza despacio. Pero en México sigue ocurriendo la desaparición forzada. El pasado 30 de agosto, en el marco del Día Internacional del Desaparecido, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) pidió al gobierno mexicano publicar la Ley General de Desaparición Forzada, frente a lo que calificó como una urgencia en nuestro país, por el alto número de casos en los últimos años.

(Lydiette Carrión)

jueves, 25 de agosto de 2011

viernes, 29 de julio de 2011

Breve aviso sobre las imágenes

Por un error en la programación de este blog, borré todas las imágenes almacenadas (hice alguna estupidez al darme de alta en G+. ¡¡¡¡Maldito google!!!). Ha sido un desastre y me di cuenta de forma tardía. Si bien este es un blog prevalentemente escrito, hay un par de entradas cuyo valor sí radica en la imagen. Tal es el caso de "la foto que no le gustó a Calderón" o "El blog del narco, más visto que Jornada y Milenio"; además de un par de entradas de imágenes y fotogalerías. He tratado de corregir en primer lugar este tipo de entradas, pero me llevará un tiempo. Si alguno de ustedes requiere una imagen que existía en el blog de forma urgente o bien considera que es necesaria su pronta recuperación, por favor avíseme al correo que se encuentra en contacto (lydicar@yahoo.com.mx o deje un comentario en la entrada en cuestión... Una disculpa y saludos


PD aprovecharé este desastre y estupidez de mi parte para cambiar el cabezal del blog. si alguien tiene sugerencias, son más que bienvenidas... ya saben, bajo el homenaje constante a William Blake , que si bien no hay aquí cabida para la poesía.. sí se trata de contar historias sde alto contraste. Salud, libertad, igualdad y alegría.

martes, 26 de julio de 2011

Crecen los muros de las Islas Marías



(Imagen: José Revueltas. autor de Los muros de agua)


Por Lydiette Carrión
*Originalmente publicado en Replicante

(De nuevo ofrezco una disculpa por tener el blog tan abandonado y no subir información exclusiva. quedan pendientes diversos temas. Espero poder ponerme al corriente en las próximas semanas. Salud y libertad.)


***

En 2005 la colonia penitenciaria de las Islas Marías cumplía un siglo de existencia. Con bombo y platillo la Secretaría de Seguridad Pública celebró ese aniversario ambivalente. Vigilar y castigar, de Michel Foucault, es de una vigencia incontestable.

La idea que se subrayó en ese entonces es que la colonia, instalada en la Isla Madre (las otras que conforman el archipiélago son María Magdalena, María Cleofas y San Juanito) arribaba al nuevo milenio como prisión modelo, no sólo en México sino en el mundo. La colonia albergaba delincuentes con largas sentencias pero de baja peligrosidad y comportamiento ejemplar. En esa isla los presos podrían vivir junto a sus familias, trabajar, cultivar la tierra o trabajar en las granjas camaroneras, acceder a pequeños placeres como visitar una playa, tomarse un refresco en la tiendita de abarrotes del puerto Balleto.


Había quedado atrás el infierno descrito en Los muros de agua por José Revueltas: no más el hacinamiento de presos políticos, comunistas, ladrones sin importancia u homosexuales; todos ellos bajo el común denominador de la pobreza), a merced de los golpes y la semiesclavitud.

En ese 2005 las autoridades presumieron: las Islas Marías están consideradas un centro de readaptación de avanzada en el plano mundial. En la isla, tanto sentenciados como sus niños van a la escuela. Muchos aprenden a hacer las famosas artesanías características de las viejas cárceles mexicanas: barquitos de madera dentro de botellas, lámparas, cuadros. Muchos de ellos con la leyenda “Islas Marías”, como si se tratara de un destino turístico.

Las cárceles federales comenzaron a explotar. O mejor dicho, a implosionar. El crecimiento de la población penitenciaria por delitos federales (en particular narcotráfico) aumentó de forma exponencial. Además la administración de los penales de máxima seguridad comenzó a poner en evidencia una descomposición sin freno.

Ya habían ocurrido otros tropiezos que comenzaron a transformar los penales federales. A finales de 2004 Arturo Guzmán Loera, “El Pollo”, sería asesinado en los locutorios del entonces llamado penal La Palma, en el municipio de Almoloya de Juárez. Ese crimen fue la gota que derramó el vaso.

Ya se vislumbraba que la suerte de las Islas Marías tendría una vuelta de tuerca. Para 2006 un ciclón había afectado su infraestructura y su recuperación fue larga y complicada. En el México continental, mientras tanto, la administración federal daba inicio a lo que llamó la guerra contra el narcotráfico.
Para inicios de 2005 los penales de máxima seguridad se habían transformado. La vigilancia se reforzó; se acabó el trabajo; no habría más talleres de guitarras o de pintura o de lectura. Los presos, durante todo ese año, saldrían de forma muy limitada de sus celdas. Apenas unos minutos para ingerir sus alimentos. Su correspondencia sería limitada. No tendrían ni siquiera el derecho a sacar libros de la biblioteca.

Frente a los escándalos de corrupción los penales federales optaron por adoptar parcialmente el modelo carcelario de Filadelfia del siglo XIX: un silencio y aislamiento casi totales. Sin embargo, en la Palma no existía la intención de propiciar una reflexión monacal en los presos para que meditaran sobre sus crímenes. Existía únicamente el intento desesperado por retomar el control de las instalaciones.

Para Foucault, la invención de las prisiones también dio inicio a la soberanía de su administración (independiente incluso del poder judicial que opera en la cotidianidad) y a un personaje “bastardo” y “deforme”: el juez que vigila la implementación de la pena. En el caso mexicano, cabe preguntarse: ¿quiénes ostentan el poder de facto en la prisión?

* * *
En 2010, y en esta refriega de guerras declaradas, de crecimiento exponencial de la población penitenciaria y la falta de control, la María Madre pasó a formar parte de los penales federales. Se alegó que la isla es grande. Comenzaron los traslados de presos federales provenientes de todas las cárceles del país.

Empezaron pequeños cambios. Los colonos dejaron atrás la posibilidad de vestir como quisieran. Desde abril de 2010 vestirán pantalón y camisa caqui, y llevarán en la parte superior izquierda de la camisa, un número.

Actualmente, el proyecto para la colonia es transformarla en una prisión para los prisioneros peligrosos.

El 3 de junio de 2011 el Diario Oficial de la Federación publicó que se construirán seis complejos penitenciarios en las Islas Marías para los reos de alta peligrosidad; dos de ellos destinados a reos de máxima peligrosidad: terrorismo, secuestro, operaciones con recursos de procedencia ilícita, tráfico de armas, tráfico de indocumentados, tráfico de órganos, corrupción de menores de edad.

El diputado federal del PRI Humberto Benítez Treviño declaró al respecto a un medio nacional: “Fue un error histórico haber construido penales de alta seguridad cerca de las metrópolis”. (Como diría Foucault, a los presos de máxima seguridad se les concibe como leprosos, a los que se debe aislar de la sociedad.)

Sin embargo, el motivo principal aludido para retransformar a las Islas Marías es aliviar la sobrepoblación penitenciaria.

Según Foucault, la creación de más cárceles sólo crearía más delincuentes. Desde que se inventaron las cárceles éstas han probado que no disminuyen la tasa de criminalidad: “Se puede muy bien extenderlas, multiplicarlas o transformarlas, y la cantidad de crímenes y de criminales se mantiene estable o, lo que es peor, aumenta”. Frente a ello, ¿tendrá sentido transformar la única colonia innovadora de avanzada en México?

¿Qué dice de una sociedad en que una cárcel como la de las Islas Marías, que había logrado remontar su propia leyenda negra como centro de exterminio a inicios del siglo XX, vuelva a ser renovada como un oscuro destino para presos de alta peligrosidad?

Dice Foucault en Vigilar y castigar. Nacimiento de la prisión [1975] que los vicios que percibimos en el sistema penal nacieron con las cárceles. La reincidencia, su falla en convertirse en verdaderos centros de rehabilitación, los abusos y excesos de la burocracia carcelera, el silencio que ocurre detrás de los muros de las prisiones y su cualidad de convertirse en “escuelas del crimen” fueron aspectos señalados incluso antes de que terminara el siglo XVIII. “Las prisiones no disminuyen la tasa de criminalidad: se puede muy bien extenderlas, multiplicarlas o transformarlas, y la cantidad de crímenes y de criminales se mantiene estable o, lo que es peor, aumenta”.

Añade: “La detención provoca incidencia. Después de haber salido de prisión, se tienen más probabilidades de volver a ella. En Francia, por lo menos, de 1828 a 1834 uno de cada casi cinco condenados eran reincidentes”.

Las críticas y los intentos por reformar a la institución carcelaria no son periféricos o eventuales, de acuerdo con Foucault. Surgen desde el inicio de la cárcel misma y parecen ser parte de su propio funcionamiento. Incluso, hace notar, la mayoría de los críticos de la prisión, por lo menos en el siglo XIX, no son filántropos ni humanistas, sino que provienen del mismo mecanismo de impartición de justicia: jueces, policías, técnicos oficiales, criminólogos.

Aunque la respuesta a estas críticas siempre ha sido la misma: el mantenimiento de los principios de la técnica penitenciaria. “Desde hace siglo y medio se ha presentado a la prisión como su propio remedio; la reactivación de las técnicas penitenciarias como la única manera de reparar su perpetuo fracaso”.

Al final de la lectura no existe una propuesta clara, alternativa a la prisión. Mientras el sistema de justicia esté fundamentado en la pérdida de la libertad las cárceles transitarán simultáneamente en sus preceptos ideales (adaptación del criminal) y su fracaso. Y en esa deriva parecen ahora naufragar las Islas Marías.